Hay dos herramientas para cuando ya tienes implementado tu sistema HACCP, la validación y la verificación.
Siempre existe una confusión entre lo que es una y la otra, te digo cuál es la diferencia.
La verificación es esa actividad donde compruebas qué es lo que está escrito en tu procedimiento se está llevando a cabo.
Como por ejemplo, en tu procedimiento describes que se hace la limpieza al finalizar el turno y revisas en piso que así sea.
La validación, en cambio, es cuando llevamos a cabo actividades distintas a la verificación y que nos confirma que efectivamente estamos cumpliendo con el objetivo del procedimiento.
Por ejemplo, cuando hablamos de controlar en una etapa de proceso un microorganismo como la salmonela y realizamos una investigación sobre el peligro como su temperatura de destrucción, además de realizar un análisis estadístico de los resultados en el producto final y reconocemos que el peligro fue controlado por la medida de control.
Estas dos actividades nos permiten mantener y evaluar de manera periódica nuestro sistema HACCP, son medidas que en un sistema implementado son fundamentales que se lleven a cabo por lo menos una vez al año.
Pero si quieres profundizar más y saber cómo implementar el protocolo correctamente en tu sistema, entonces te esperamos para comprobar que el sistema está funcionando correctamente.